Alberto Matellán
Economista Jefe de MAPFRE Inversión
Octubre es uno de los meses particularmente peligrosos para especular en la Bolsa. Los otros meses peligrosos son julio, enero, septiembre, abril, noviembre, mayo, marzo, junio, diciembre, agosto y febrero. Esta frase de Mark Twain define muy bien la complejidad de los mercados financieros y el difícil rol del asesor financiero. Pero siempre hay pautas que un inversor particular puede seguir para, al menos, tomar las decisiones de una forma más acertada.
Alberto Matellán, economista jefe de MAPFRE Inversión, ha estado ofreciendo en las últimas semanas una serie de consejos para los inversores no profesionales, y todos ellos conducen a uno: “Invertir con sentido común”, explica en una entrevista con el programa A Media Sesión, de Radio Intereconomía. El experto señala que, en primer lugar, uno debe preguntarse por qué inviertes, es decir, qué te motiva a hacerlo. Una vez tenga una respuesta debo hacerlo sin prisa, “puesto que no hay una decisión de inversión que se tome en horas o incluso días”. Eso sí, hay que tener “disciplina, sentido crítico y hacerlo con humildad para no meternos en lo que no conocemos”.
Se trata de unos consejos valiosos para afrontar la situación actual de las bolsas. Los mercados financieros han vivido un auténtico rally de fin de año, que ha compensado buena parte de las pérdidas acumuladas desde el comienzo de la pandemia. Y parece que este escenario más positivo se mantendrá durante el año que viene. “Hay un cóctel de factores que lo justifican: unos datos macroeconómicos mejores de lo previsto; la apuesta de los inversores por el fin de la pandemia, en algún momento del año que viene; y la inmensa liquidez que abunda al mercado”, explica Matellán. Eso sí, advierte de que todo pinta bastante bien de cara al año que viene, pero será un ejercicio no exento de riesgos, como los que pueden provenir de ese exceso de liquidez.
La percepción ha mejorado tanto que incluso podrían mantenerse los máximos de Wall Street. “Se pueden mantener (los máximos) en la medida en que continúen los factores que lo han llevado ahí. ¿Qué riesgos hay? El más cercano, una ola de pandemia inesperada a comienzos del año próximo, algo que veo menos probable, o una decepción de los datos macro que sí podría ocurrir”, explica. Como dato interesante, añade que habrá que ver cómo el crecimiento económico, que es estima en cotas superiores al 5%, se traslada al beneficio por acción. “Podríamos ver crecimientos superiores al 20% del beneficio, lo cuál sería muy positivo para las bolsas mundiales”, añade.
A este lado del Atlántico, el consenso de expertos espera crecimientos cercanos al 6% en España y del 4,6% en la eurozona en su conjunto. Evidentemente, como explica Matellán, las nuevas restricciones no ayudan, pero se queda con la parte positiva: “La economía acaba adaptándose a estas situaciones, lo cual es una de nuestras mayores riquezas”. Es importante, en su opinión, esperar a ver lo que ocurre a partir de febrero o marzo para sacar nuevas conclusiones sobre los efectos sobre la economía.
Mientras, siguen los movimientos en los mercados de divisas, provocados por un movimiento, ya coordinado, entre la Fed y el Tesoro estadounidense tras el nombramiento de Janet Yellen. “La Fed está siendo muy agresiva. Está fabricando dólares a mansalva y está siendo apoyado por el Tesoro. Trabajan mano a mano para inundar de dólares la economía americana y mundial”, concluye.