Consume un 15% menos de energia al año y evita la emisión de 4.860 tm de co2e a la atmósfera.
Reducirá su consumo energético en 60 gwh para el año 2030.
Promueve el consumo eficiente de energía y el uso de renovables para alcanzar la neutralidad en 2030.
En 2022, cerca del 30% del consumo eléctrico actual en la sede social, en Madrid, procederá de la instalación de autoconsumo fotovoltaico.
Para 2030, se ha comprometido a que el 50% de la superficie de los grandes edificios en propiedad tengan certificación sostenible.
MAPFRE avanza en su compromiso con la eficiencia energética como elemento clave en su estrategia de sostenibilidad y para cumplir con retos importantes, como ser una empresa neutra en 2030.
Su Plan de Huella Ambiental 2021-2030 establece objetivos ambiciosos, como reducir el consumo energético del Grupo con respecto a 2019, en 23 GWh para 2024 y en 60 GWh para 2030.
Actualmente, la compañía utiliza energía procedente de fuentes 100% renovables en España y Alemania y ha instalado paneles fotovoltaicos de mayor potencia en la sede social, que permitirán generar 2,5 GWh al año. Con esta medida, que finalizará en 2022, se prevé que cerca del 30% del consumo actual en la sede social, en Madrid, proceda de la instalación de autoconsumo fotovoltaico.
A lo largo del año, también lleva a cabo otras iniciativas que le permiten ajustar la climatización en sus edificios, algo que logra con campañas como ‘Warm Biz’ en España, dirigida a ahorrar el consumo de energía en invierno, y ‘Cool Biz’ en España y México, para consumo energético en verano.
Gracias a todas estas medidas, MAPFRE redujo el año pasado su consumo energético en 23.064.812 kWh, un 15,3% menos que en 2020, una cifra que supera el objetivo previsto de reducción del 2% para 2021. Gracias a esta rebaja en su consumo, la aseguradora ha evitado la emisión de 4.860 Tm de CO2e a la atmósfera.
Edificios verdes
MAPFRE dispone de 13 edificios, como la Torre MAPFRE de Barcelona, con el certificado LEED, BREEAM o Energy Star (sellos líderes en Eficiencia Energética y Diseño Sostenible), que confirma que estos espacios están construidos y diseñados para reducir el impacto ambiental, es decir, ahorrar energía, hacer un uso eficiente del agua, reducir las emisiones de CO2, mejorar la calidad del ambiente interior y minimizar el uso de recursos naturales, entre otros.
La aseguradora se ha marcado el compromiso de ejecutar todas las nuevas construcciones y grandes reformas con el objetivo de conseguir que, para el año 2030, el 50% de la superficie de los grandes edificios en propiedad se encuentren certificados como edificación sostenible.