Con el Domingo de Ramos ha comenzado oficialmente la Semana Santa 2019 en España. Cada año miles de personas acuden a las distintas ciudades españolas para observar los tradicionales desfiles religiosos.
La Madrugá de Sevilla, Las Turbas en Cuenca, o El Encuentro de Valladolid, son algunas de las Procesiones en las que cientos de penitentes, capataces, costaleros y músicos, sacarán a las calles sus imágenes bajo la mirada de fieles y turistas.
La mayoría de ellos invierten todo el año preparando el acontecimiento, y debido a las fechas, la amenaza de la lluvia les puede impedir tomar la calle junto a su hermandad. Es por ello que contar con un seguro que compense los gastos no recuperables puede ser de tranquilidad para las cofradías.
Al tratarse de un evento multitudinario pueden producirse otros accidentes, como, por ejemplo, que los cofrades involuntariamente golpeen con sus pasos a algún espectador, ocasionen quemaduras con sus cirios o causen desperfectos en el mobiliario urbano. Por ello contar con una cobertura de responsabilidad civil, como la que ofrece MAPFRE que puede contratarse a partir de 150 euros, es recomendable.
Asimismo, los costaleros realizan grandes esfuerzos físicos, en caso de sufrir una lesión, contar con un seguro de accidentes garantizaría la asistencia sanitaria a todos los miembros de la hermandad.
Existen otros riesgos, cubiertos por la póliza, como el robo o el incendio de los bienes de las cofradías que afecten al patrimonio de las hermandades, que en muchos casos es de un incalculable valor.
Cada situación se estudia individualmente en función de los riesgos que se quieran asegurar, número de personas que participan, valor de las imágenes, tipo de actividad, entre otros aspectos.